Reflexiones después de ver Paranormal activity 2 o por qué hay secuelas que sí y secuelas que no (warning!, possible spoilers):
- La principal baza de Paranormal activity era el factor sorpresa. Cuando llega la secuela el espectador quiere más de lo mismo, pero mejor y no es el caso.
- Me encanta que no muestren al demonio/ente culpable de todo: seguro que lo que nos imaginamos da mucho más miedo, es el poder de la mente, que diría mi profesor de lenguaje publicitario.
- Está muy bien darle verosimilitud a fuerza de empezar despacio y poner fragmentos de noches en las que no pasa nada, pero la primera media hora es exageradamente lenta. Ellos no dormirán, pero el espectador seguro que sí.
- Que la actriz protagonista sea algo conocida le resta encanto. Katie y Micah podrían ser cualquier pareja joven grabando un vídeo doméstico.
- Los supuestos fenómenos (para)normales del principio son flojos (una sartén que cae, el limpiafondos saliendo fuera de la piscina y una puerta que se cierra de golpe) y no suben de intensidad, pasamos directamente a que el demonio se lleve a la madre al sótano.
- El final parece hecho deprisa y corriendo porque se les terminaba el presupuesto, ni sombra del miedo que provocaba el primer plano de Katie en visión nocturna de la primera.
- Punto muy a favor: no era fácil plantear una secuela y la historia está muy bien hilada respecto a su predecesora. Hay que ver cómo se las gastan los cuñados…
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